Katalin Karikó, un osito de peluche relleno de dinero y un Premio Nobel por toda una vida de trabajo
- Katalin Karikó es un inspirador ejemplo de perseverancia y compromiso, superando múltiples desafíos y finalmente logrando el Premio Nobel de Fisiología o Medicina junto con el Dr. Drew Weissman en 2023.
- Su trabajo pionero en tecnología de ARNm, en colaboración con el Dr. Drew Weissman, finalmente llevó al desarrollo de vacunas de ARNm contra la COVID-19.
- La filosofía de Katalin Karikó se centra en los factores dentro de su control y en tener una visión optimista del futuro.
Pensilvania, año 1997, un par de científicos hablan en la fotocopiadora. En ese momento no lo saben, pero están forjando la ciencia detrás de la invención que años después afectaría a las vidas de muchas personas — el desarrollo de vacunas de ARNm contra la COVID-19. Ellos eran la Dra. Katalin Karikó y el Dr. Drew Weissman.
Abington Township, Filadelfia, año 2023, 3:40 a.m. El teléfono suena en la casa de Katalin Karikó. Era una llamada desde Estocolmo: había ganado el premio Nobel de medicina.
«The second scientist» es una serie de artículos cuyo objetivo es presentar al lector a algunas científicas destacadas que jugaron un papel notable en el avance de la ciencia y la configuración del mundo. Este artículo se adentra en la vida de la bioquímica Katalin Karikó con el propósito de dar a conocer su trayectoria, y de despertar curiosidad alrededor de su figura. Además del reconocimiento de sus investigaciones que resultó en el Premio Nobel, la carrera científica de la Dra. Katalin Karikó es un claro testimonio del poder de la resiliencia y la determinación. Su compromiso la hizo perseverar en el desarrollo de una tecnología que al principio suscitó escepticismo, pero que finalmente le valió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 2023 junto con el Dr. Drew Weissman. Recibieron el Nobel por sus innovadores descubrimientos que permitieron el desarrollo de vacunas de ARNm efectivas contra la COVID-19.
Katalin Karikó nació en 1955 en Sznolnok (Hungría). Creció en Kisújszállása, un pequeño pueblo a unos 150 km al este de Budapest, donde no había agua corriente ni televisión. Su padre trabajaba como carnicero, su madre era contable, y juntos vivían en una casa «muy sencilla» [1]. Karikó recuerda una infancia muy alegre marcada por una fascinación por la anatomía de los animales que su padre sacrificaba. A la edad de 14 años, tras destacar en un concurso nacional de biología y quedar tercera del país, ya se dio cuenta de que quería ser científica.
Karikó comenzó su andadura académica en Hungría, pero a los pocos años se vio obligada a abandonar su país natal por falta de financiación, una triste situación a la que se enfrentan muchos científicos en todo el mundo, fenómeno conocido como fuga de cerebros [2,3]. En sus primeros años académicos, ya había desarrollado la visión de que el ARN mensajero (ARNm) podría usarse para instruir a las células para que produzcan sus propios compuestos terapéuticos, incluidas las vacunas, aunque también era consciente de los retos que ello conllevaba.
En 1985, a Karikó le ofrecieron un puesto en la Universidad Temple de Filadelfia. Por aquel entonces, el gobierno húngaro solo permitía a las personas salir del país con 100 dólares, así que metió de contrabando un poco más de dinero extra en el osito de peluche de su hija y se marchó a Filadelfia con su familia. Durante su investigación postdoctoral, siguió trabajando en su idea poco ortodoxa de desarrollar una terapia antiviral basada en ARNm, aunque en ese momento tenía una formación limitada en inmunología. Pasó de un laboratorio a otro y luchó por obtener financiación, ya que sus ideas parecían descabelladas y poco convencionales. A principios de los años 90, las terapias y vacunas de ARNm aún estaban en sus inicios, y solo unos pocos grupos de investigación exploraban el campo. Sin embargo, Karikó siempre reconoció su potencial. Eventualmente, en 1989, obtuvo un puesto de profesora investigadora no titular en la Universidad de Pensilvania en Filadelfia.
Un día, mientras fotocopiaba algunos documentos, conoció a Drew Weissman, otro profesor adjunto recién llegado que mencionó que estaba interesado en desarrollar una vacuna contra el SIDA. Se dieron cuenta de que sus conocimientos se complementaban perfectamente: Karikó aportaba su amplio conocimiento en tecnología de ARN, y Weissman aportaba su experiencia en inmunología para aplicarla. Juntos se embarcaron en una investigación pionera sobre vacunas de ARNm, aunque con escasa financiación ya que la terapia génica dominaba la atención científica en ese momento y los científicos aún no tomaban en serio la tecnología terapéutica de ARN [4].
Al principio, los múltiples intentos de Karikó y Weissman fueron infructuosos, ya que el ARNm utilizado desencadenaba una fuerte reacción inmune en las células inmunitarias. El sistema inmunitario reconocía al ARNm como un intruso, lo que llevaba a la producción de proteínas inflamatorias, haciéndolo inadecuado para fines terapéuticos. De hecho, en condiciones normales, el ARNm nunca sale de las células ni se encuentra con células inmunitarias en el cuerpo. Por lo tanto, el principal desafío consistía en transportar efectivamente el ARNm al interior del organismo [5]. Sin embargo, después de investigaciones adicionales, pudieron demostrar que, con unas pocas modificaciones, el ARNm podía pasar desapercibido por el sistema inmunitario [5]. Karikó y Weissman reconocieron las profundas implicaciones de su descubrimiento para la terapia basada en ARNm. A pesar del rechazo inicial como contribución incremental por parte de la revista científica Nature, su trabajo, que años después les otorgaría un Premio Nobel, fue finalmente publicado en la revista Immunity [6]. Para obtener más información técnica sobre la biología que subyace a las vacunas de ARNm y los distintos tipos de tecnologías basadas en el ARN, puede leer nuestros artículos anteriores sobre el tema.
En retrospectiva, es fácil ver que su descubrimiento de las modificaciones de ARNm fue innovador y muy prometedor. Sin embargo, por aquel entonces, ni la universidad ni las empresas farmacéuticas de la época estaban dispuestas a financiar el trabajo de Karikó, que fue tachado de poco realista. Tras repetidos intentos fallidos de conseguir financiación para llevar a cabo sus ideas, fue degradada de su puesto en la facultad y obligada a retirarse de la Universidad de Pensilvania [7].
A la edad de 58 años y tras 28 años viviendo en Estados Unidos, se enfrentó a un serio revés en su carrera. Sin embargo, en un alarde de determinación, en 2013, Karikó se trasladó a Mainz (Alemania), incorporándose a la plantilla de la empresa BioNTech, donde siguió trabajando en las aplicaciones del ARNm. BioNTech, por aquel entonces, era una pequeña y poco conocida empresa de biotecnología especializada en productos farmacéuticos de ARN. Al comienzo de la pandemia de COVID-19, a Karikó se le encargó el diseño de una vacuna para el SARS-CoV-2. El resto es historia. Gracias al trabajo que ella y Weissman realizaron en los años anteriores, la vacuna pudo desarrollarse muy rápidamente. Ahora, BioNTech es una empresa mundialmente conocida gracias al desarrollo de su vacuna COVID-19, en colaboración con la empresa farmacéutica Pfizer. En la fecha de publicación de este artículo, se han administrado más de 13.000 millones de dosis de vacunas COVID-19 en todo el mundo [9]. Karikó es vicepresidenta de BioNTech desde 2019 y también es profesora adjunta de Neurocirugía en la Universidad de Pensilvania, donde fue readmitida.
A pesar de ser degradada varias veces a lo largo de su carrera, nunca se quedó en la autocompasión ni en la la pregunta «¿por qué a mí?», ni tampoco se tomó estos obstáculos como algo personal, como ha explicado en varias entrevistas. En lugar de eso, siempre se centró en “¿qué es lo siguiente?» y adoptó un enfoque estoico [8]. Su resistencia y perseverancia la llevaron a no rendirse nunca y a afrontar la adversidad transformando el estrés en cambios positivos. Su propia hija aprendió de su ejemplo de determinación y se ha convertido en campeona olímpica de remo en dos ocasiones.
Son muchas las pequeñas y significativas decisiones que llevan a un descubrimiento de este calibre que repercute en la vida de miles de personas en todo el mundo. Innumerables «y si…» que podrían no haber ocurrido. Si no hubiera dejado Hungría por Pensilvania. Si nunca se hubiera unido a BioNTech. Si ella y Weissman nunca se hubieran encontrado al azar en la fotocopiadora y hubieran hablado. De todo esto, ciertamente hay una lección que aprender: Habla con tus colegas, salúdalos en los pasillos, nunca dejes de hacer preguntas. Nunca se sabe.
Referencias
- https://www.youtube.com/watch?v=g8HNHcXZUl4 , JCI’s Conversations with Giants in Medicine: Katalin Karikó.
- Nair, P. QnAs with Katalin Karikó. Proc. Natl. Acad. Sci. (PNAS) USA 2021, 118, e2119757118.https://www.pnas.org/doi/10.1073/pnas.2119757118
- Weinberg BA. Developing Science: Scientific Performance and Brain Drains in the Developing World. J Dev Econ. 2011 May;95(1):95-104. doi: 10.1016/j.jdeveco.2010.05.009. PMID: 27152061; PMCID: PMC4854430. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4854430/
- https://www.reuters.com/business/healthcare-pharmaceuticals/kariko-weissman-win-medicine-nobel-covid-19-vaccine-work-2023-10-02/
- Karikó K, Ni H, Capodici J, Lamphier M, Weissman D. mRNA is an endogenous ligand for Toll-like receptor 3. J Biol Chem. 2004 Mar 26;279(13):12542-50. doi: 10.1074/jbc.M310175200. Epub 2004 Jan 16. PMID: 14729660. https://www.jbc.org/article/S0021-9258(19)64193-1/fulltext
- Karikó K, Buckstein M, Ni H, Weissman D. Suppression of RNA recognition by Toll-like receptors: the impact of nucleoside modification and the evolutionary origin of RNA. Immunity. 2005 Aug;23(2):165-75. doi: 10.1016/j.immuni.2005.06.008. PMID:16111635.https://www.cell.com/immunity/fulltext/S1074-7613(05)00211-6?_returnURL=https%3A%2F%2Flinkinghub.elsevier.com%2Fretrieve%2Fpii%2FS1074761305002116%3Fshowall%3Dtrue
- https://www.nobelprize.org/prizes/medicine/2023/kariko/interview/
- https://ourworldindata.org/covid-vaccinations
- https://www.cnbc.com/2023/10/06/nobel-prize-winner-katalin-karik-on-being-demoted-perseverance-.html
- https://penntoday.upenn.edu/news/wrong-number-cryptic-message-and-big-win-nobel-weissman-kariko
- https://en.wikipedia.org/wiki/Katalin_Karik%C3%B3
- https://www.bu.edu/articles/2021/how-drew-weissman-and-katalin-kariko-developed-mrna-technology-inside-covid-vaccines/
- https://www.nytimes.com/2021/04/08/health/coronavirus-mrna-kariko.html